Tengo un Libro de nítidas páginas
que nunca envejece, que siempre está nuevo.
y que encierra misterios de gloria
y da a nuestras vidas divinos consejos.
Este libro precioso y sublime
es la luz para el alma, pan para el hambriento;
y es agua de vida que limpia y redime
y apaga la sed del sediento.
¡Cuán grande enseñanza , oh Libro bendito,
me das en las horas de pena o solaz¡
¡Oh fuente amorosa del Dios infinito
tú inundas mi vida de gozo y de paz¡
Narciso Solero
domingo, 26 de julio de 2009
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